Quisiera presentar mi obra desnuda de palabras y explicaciones, envuelta en el silencio. Un silencio que busca los silencios, las palabras, los sonidos de otros silencios, un silencio que encuentre silencios… silencios aunados para sentir. Crear, dejarse llevar por la inquietud; la búsqueda, encontrar, sumar, pensar, dar forma, acariciar, soñar y finalmente vivir. Siempre presente el deseo y la necesidad de dejar el rastro de mi existencia en la memoria de los míos.
Las esculturas están realizadas en madera, materia a la que mi vida ha estado siempre vinculada, la mía y la de mis antepasados. No obstante mis esculturas están pensadas también como maquetas que puedan ser igualmente desarrolladas en otros materiales y en otras dimensiones, si con ello se adaptan mejor al medio o al espacio concreto de su ubicación. De formación autodidacta, mi deseo es provocar un estremecimiento íntimo en el que ve, toca o intuye lo creado.
Benoit Van den Heede